La empresa de dispositivos médicos Abbott informó los resultados de un ensayo clínico de un nuevo tratamiento. Consiste en cortar la válvula tricúspide flexible para hacerla más pequeña y que funcione mejor.
En el estudio, los pacientes con fuga de la válvula tricúspide mejoraron con un procedimiento que no requirió una cirugía a corazón abierto riesgosa. Por primera vez, los pacientes con una válvula tricúspide dañada pueden recibir un tratamiento realmente útil y seguro.
La válvula tricúspide: del tratamiento al TripClip
La empresa de dispositivos médicos Abbott informó los resultados de un ensayo clínico de un tratamiento que consiste en cortar la válvula tricúspide flexible para hacerla más pequeña y que pueda funcionar mejor. El dispositivo de clip TripClip utilizado es similar a uno utilizado con éxito para tratar a pacientes con daño en otra parte del corazón, la válvula mitral.
En el estudio financiado por Abbott, los investigadores informaron que los clips detuvieron la mayor parte de la fuga y permitieron que muchos pacientes sintomáticos volvieran a la vida normal. El tratamiento también fue seguro, con un riesgo de muerte en estos pacientes críticos de menos del uno por ciento y una estadía hospitalaria promedio de un día. El precio del programa aún no se conoce.
El estudio de Abbott involucró a 350 pacientes con una edad promedio de 78 años que padecían válvulas debilitantes con fugas, también conocida como regurgitación, que va desde lo que se clasifica como insuficiencia valvular grave hasta lo que se denomina regurgitación grave. Fueron asignados aleatoriamente a tratamiento médico con diuréticos de asa.
Un mes después de la implantación del clip, la regurgitación tricuspídea se redujo a leve o moderada. En el 87 % de los pacientes, en comparación con el 4,8 % de los pacientes que recibieron diuréticos del asa. Los pacientes que recibieron el clip informaron una reducción en los síntomas incapacitantes.
“Históricamente, se creía que los pacientes con insuficiencia tricuspídea podían pasar sin tratamiento o recibir tratamiento médico. Por lo general, no operamos a estos pacientes porque es una cirugía de muy alto riesgo”, dice el Susheel K. Kodali, MD, director del Centro de Válvulas y Corazón Estructural de Columbia en NewYork-Presbyterian/Columbia University Irving Medical Center.
Actualmente, la cirugía a corazón abierto se considera demasiado arriesgada. La mortalidad operatoria es del 10%, que es 10 veces mayor que la mortalidad por reemplazo de válvula aórtica.
Datos
- Los hallazgos fueron publicados en el New England Journal of Mediciney presentadas en la reunión anual del American College of Cardiology.
- Más de 1 millón de estadounidenses, la mayoría de los cuales son ancianos, padecen una fuga grave de la válvula tricúspide, que eventualmente conduce a una insuficiencia cardíaca.
- Por otro lado, es posible que los pacientes pronto tengan una opción de tratamiento diferente cuando otra compañía, Edwards Lifesciences, complete un ensayo clínico en curso de un enfoque diferente. El ensayo propone que la válvula tricúspide sea reemplazada enroscando una válvula nueva en el corazón y empujando la válvula vieja hacia un lado en un procedimiento similar al procedimiento llamado reemplazo de válvula aórtica transcatéter. La aorta controla el flujo de sangre al corazón y la TAVR se ha utilizado para reemplazar válvulas en cientos de miles de pacientes.
- Estos avances se producen después de años de ignorar los problemas de la válvula tricúspide. Durante mucho tiempo esta válvula fue conocida como la válvula olvidada.
- Los cardiólogos alguna vez creyeron que si trataban un problema en el lado izquierdo del corazón, como una válvula mitral o aórtica con fugas, la válvula tricúspide se repararía sola. Su suposición estaba equivocada.
Tome el control de su salud
Si en estos momentos está requiriendo de un chequeo médico, regístrese gratis ahora mismo y nuestros especialistas estarán en línea para su consulta médica.
